Revolución industrial

Como siempre la evolución se impone, una muestra de esto es la revolución industrial, inició en la segunda mitad del siglo XVII; ya no se basa la economía en artesanía y agricultura. Esta revolución nace en Gran Bretaña, esto fue un cambio radical, ya que tres cuartas partes pertenecían a trabajos agrarios y artesanales. El comercio antiguamente era para subsistir, no para comercializar, ya que la productividad era baja.

Como ya no existía el absolutismo como forma de gobierno, donde se consideraba que todo era propiedad del rey. Fue posible la revolución industrial, por la existencia de la monarquía liberal. Se puede decir, que, Gran Bretaña era un territorio estable, ya que no tenían guerras, aunque participaron en algunas, no se desarrollaron en sus tierras. No solo era un territorio estable, su moneda también y, años más tarde es creado el Banco de Inglaterra, fundado en 1964.

Se produjeron cambios:

       -   Tecnológicos: uso del acero, del carbón, maquinas motrices (máquina de vapor), también se crean máquinas de hilar y tejer, así, logrando aumentar la producción.

        -  Socio-económico: desarrollan técnicas de trabajo y especialización de la mano de obra. Por otro lado, se desarrolla el transporte por trenes y barcos.

        -  Culturales: aumenta en conocimiento en diferentes ramas, desde científicas o técnicas, hasta sanitarias.

         - Sociales: aumenta el crecimiento de las ciudades, así como también aumento la tasa de natalidad y la de mortalidad disminuye, gracias a las vacunas, a la evolución alimenticia, entre otros.

No obstante, las condiciones en las que trabajaban eran inhumanas y la explotación por la cantidad de horas y días que trabajaban a cambio de poco, se organizaron para defender sus intereses y aparecen los movimientos obreros de protesta.

Aunque hubo un cambio positivo notable en muchos ámbitos creando un nuevo modo de vida, no llegó con la misma intensidad a toda Europa, es decir, algunos seguían sumergidos en trabajos agrarios. No todo fue tan positivo, ya que trajo grandes consecuencias, causando la guerra civil en Estados Unidos a finales del siglo XIX.

Estados unidos había alcanzado a Gran Bretaña en producción industrial y contaban con un mercado muy dinámico. La construcción del ferrocarril permitió la colonización del Oeste, a su vez, la industrialización se basó en la innovación tecnológica.

En Japón la industrialización comenzó por la actividad textil. Al ser patrocinados del Estado en la construcción de ferrocarriles y bancos, gracias a una mano de obra asequible con fácil adaptación a la tecnología, Y contaban con grupos orientados a la exportación, este país se convierte en una gran potencia.